4/05/08

Belleza entre sombras



Soñé...
Soñé entre sombras caer al abismo,
Y que un vació intenso recorría mi espíritu.
Soñé entre sombras grandes soledades,
Silencios eternos con ecos mortales.
Soñé que moría viviendo en el tedio,
Soñé que vivía en un mausoleo...
Soñé tantas cosas y todas amargas,
Un mundo de Caos bañando mi alma.

Pero en aquel tiempo, sombrío y nublado...
Yo vi una niña, sufriendo y llorando.
Vestía de negro, miraba al vació,
Su triste semblante cubría un abrigo.
Me miro a los ojos con tal hipnotismo...
me sonrió fríamente... y caí rendido.

Belleza nocturna oculta entre sombras,
antiguos enigmas respiro en tu aroma.
Princesa de ensueño, de oscuros pesares...
de mirada triste, de profundos amares,
Comparto tus penas y tus sentimientos...
como almas gemelas, en el desconsuelo.



OdrA

22/03/08

Insoportable Levedad



La fuerte brisa golpea mi rostro y activa mis sentidos…


Abro los ojos lentamente y con desden… y levantando la vista observo poco a poco destellos de luz entre un universo lúgubre y sombrío; el cielo se presenta cubierto de nubes, y relámpagos de agonía deleitan mi mente zigzagueando en dicha inmensidad. Por un instante la zozobra recorre mi existencia más un sutil llamado me invita a bajar mi rostro, topándome con el seductor vértigo. Me veo en lo más alto de la absoluta nada, suspendido en una porción de tierra lo suficientemente grande como para sostener mis miedos y deseos… y mas allá, en lo profundo de aquel abismal averno, el susurro de la muerte crea ecos en mi cabeza dibujando un esbozo apático de sonrisa en mis labios.


OdrA

12/02/08

Ausencia de Ti


Un pensamiento arbitrarío agobia mi mente...
y un deseo idiota de tenerte me trae melancolia.
Duele verte en mi memoria y no tocarte con mis labios,
pues tu ausencia de presencia dice a gritos que no estas.
Y suspiro ante la luna, pues envidio su fortuna;
ella vela ahora tus sueños y yo anhelo ser parte de ellos.


OdrA

Y...


Y lleno mi mente de argumento para no devorar tus labios con tan solo una mirada...

Y mis sentimientos ya no aguantan tu ausencia de textura...

Y aquel lobo amante se consume en su propia pasión provocada por tu cuerpo...

Y... aquel pájaro poeta se traga sus cantos versos pues el viento, no merece siquiera suspirar ante ellos.


OdrA

Arlequín


Un destello de alegría se posa altivo en tu rostro.

Y yo sonrió a la distancia, pues este triste arlequín fue causante de aquel milagro...

Milagro no tu sonrisa, sino aquella conexión entre una bella diosa y un vagabundo y melancólico artista.



OdrA

28/01/08

Triada


Bella y triste te descubrí una mañana.
Con un vestido de nieve te observe por la ventana,
Con mis ojos taciturnos y una mente adormecida…
No creí tal maravilla; de tus labios de ambrosia me lanzaste sin aviso,
Un beso en forma de hechizo condenando a ti mi alma.
Eras ya mi mejor musa sin decir una palabra.

Fue en una tarde de invierno, en el día de mis santos,
Rodeado de mil espantos e interne en mis pensamientos.
Me canse de hipocresías, banalidades, tonterías…
Cerré mis ojos con rabia… me perdí en mis fantasías.
Fue en aquel primer instante, de inconciencia absoluta,
Que a pesar de mi inocencia, sentí tus brazos de puta,
Consolar mi sufrimiento. Mujer de mundo y misterios,
me besaste con pasión y ante ninguna mirada…
Cautivaste mi razón.

Era una noche sin luna, tan negra como mi alma y
Acostado ya en mi cama, mantuve los ojos abiertos.
Era una noche de averno, donde nada me importaba,
Me había vuelto un misterio ante el mundo que rondaba…
Estaba lleno de mascaras, de mentiras, de fachadas…
De tristezas de bellezas; no era un hombre, no era nada…
Asexual sin sentimientos.
Había llegado mi fin, pues morir ya deseaba
Y con la mente dispuesta y agallas afiladas,
Lancé un tajo cobarde, cortando el viento y la nada…
Buscando pronto mi muerte.

Pero una voz me detuvo, salida de las tinieblas,
Y con palabras concretas, frenaron con mi arrebato…
“El que abandones el mundo, solo en nosotras recala”
Y mostrando su figura, de recia princesa aciaga,
Atrapo mi corazón y de paso mis entrañas…

Me quede estupefacto; la locura en mi reinaba,
Y para completar la triada; triste y bella, el Silencio…
Y Soledad, apasionada salieron a lado y lado,
De aquella oscura, dama aciaga.


OdrA